Los dos antagonistas principales en Corazón de Madre, la exitosa teleserie brasileña transmitida por Mega, fueron Álvaro de Nóbrega (Irandhir Santos) y Thelma Lopes (Adriana Esteves), quienes en el final de la historia, pagaron con su vidas el mal que cometieron.
Sin embargo, sus motivaciones y muerte marcaron la diferencia entre ambos villanos, pero sí coincidieron en algo: alguien los acompañó al momento de morir.
Quien a hierro mata, a hierro muere
El empresario Álvaro de Nóbrega nunca dudó en quitar cualquier obstáculo que le impidiera el éxito económico en su empresa, la PWA. Su ambición lo hizo contaminar el agua de un pequeño pueblo, intentar eliminar por completo el barrio del Paseo, sobornar e incluso matar a sus enemigos.
Pero su violento actuar se volvió contra él. La policía descubrió sus delitos y en un desesperado intento de escape, se coló en la PWA para tomar los últimos restos de dinero que le quedaban.
No contaba con que su rival y ex amigo, Raúl (Murilo Benício) entraría en la oficina y lo sorprendería con las manos en la masa. Con un revólver en las manos, Álvaro quiso huir pero un forcejeo terminó con un disparo mortal.
El empresario cayó al piso y se arrastró hasta la que fue su silla de presidente de la compañía, donde finalmente murió.
Un aneurisma largamente anunciado
Desde el inicio de la teleserie, Thelma fue diagnostica con un aneurisma cerebral inoperable que le podría causar la muerte el día menos pensado.
Por este motivo, la dueña de la Tasca del Paseo hizo una lista con deseos por cumplir, pero ante la posibilidad de que se descubriera que compró a Danilo (Chay Suede) siendo un niño, sus acciones terminaron convertidas en graves crímenes que la dejaron sola en sus momentos finales.
Con ganas de ver a su hijo por una última vez, aguantó en su cama de hospital al momento en que el joven entró y con sus manos entrelazadas, dio su último suspiro.