“Los asesinos de la luna” es la película que marca el regreso del director Martin Scorsese, junto a dos de sus actores favoritos, Leonardo DiCaprio y Robert De Niro. Está basada en una de las historias negras de los Estados Unidos, la masacre al pueblo nativo de Osage.
La película cuenta con 10 nominaciones a los premios Oscar, que incluyen a De Niro como Mejor actor de reparto y a Lily Gladstone como Mejor Actriz. Leo DiCaprio no participa como Mejor actor.
Scorsese retrata la historia de la cruel masacre a los nativos americanos, dueños de tierras cargadas de petróleo en Oklahoma. Este caso representó la primera gran investigación del FBI, que recién se había creado, tal como reseña Esquire.
¿Quiénes eran los personajes de Leonardo DiCaprio y Robert De Niro en la vida real?
El largometraje está basado en la novela del periodista David Grann y, de acuerdo con información de CNN, los espectadores deben preparar sus pañuelos para limpiar las muchas lágrimas que derramarán durante más de tres horas de proyección.
El pueblo Osage fue desplazado por el propio gobierno estadounidense desde 1870, hasta que finalmente, a principios del siglo XX, les asignaron un territorio desolado en Oklahoma. Explica Newtral que tras algunos años de hambruna descubrieron que bajo sus pies había petróleo.
Se convirtieron, de la noche a la mañana, en el pueblo más rico del mundo. Fue entonces cuando los blancos volvieron a mirarlos e idearon todo un plan para despojarlos de su fortuna, que incluía asesinatos sistemáticos y casamientos con las nativas.
Es allí donde entran en acción los personajes de Leonardo DiCaprio (Ernest Burkhart) y su tío William King, interpretado por Robert De Niro. Dos de los mayores asesinos de los Osage.
La trama de corrupción que se tejió en torno a los asesinatos, dificultaba las averiguaciones del FBI y de investigadores privados que algunos nativos intentaron contratar.
Esquire refiere que con esta película Scorsese busca lograr “un poco de justicia” a esta desconocida historia, pero además a la “eterna deuda que el cine americano tiene con los indios”.