Cuando pasa la tormenta, llega la calma que permite ver con cariño la historia vivida. Tras su mediático divorcio en 2013, Amaya Forch recordó cómo fue el inicio de su relación con Amaro Gómez-Pablos, de quien se enamoró “perdidamente”,según confesó.
Casarse y tener hijos no estaba en los planes de la actriz y cantante, así que su amor por el periodista la tomó por sorpresa. “Yo creo que me pilló volando bajo”, confesó entre risas a Luis Jara, en el programa "Al Piano con Lucho" de TV+.
Amaya Forch recuerda su matrimonio: “Es un error decir que no funcionó”
En 2006 se casaron, tras una petición de mano con anillo de compromiso y demás formalidades. Se convirtieron en padres de Julieta y Alonso, contra todo pronóstico, pues Amaya pensaba que no podría ser madre tras haber sufrido una peritonitis en la infancia.
Pero su historia de amor acabó en 2013, con un sonado divorcio. Sin embargo, Amaya considera un error repetir la frase “no funcionó”. “Obviamente que funcionó. Todo amor, aunque dure un día, funciona; es una mala expresión”, puntualizó.
Agregó que “si estás entregado 100%, de corazón, honesto, siendo tú y totalmente entregado a esa relación, obviamente que funciona”.
Sobre la separación dijo que fue dolorosa y difícil, aunque asumió la presión mediática como parte de sus vidas, por ser personajes públicos.