Los inhibidores de celulares ya están operando en algunas cárceles. Implementación de esta tecnología que era esperada para combatir a las bandas que siguen estafando y operando tras las rejas.
El equipo de Mega Investiga ingresó a Santiago 1, el recinto penitenciario más grande de Chile para ser parte de un sorpresivo allanamiento y dar cuenta de cómo los teléfonos celulares son un objeto clave al interior.
Lucha contra bandas criminales
Y es que los reclusos coordinan bandas, estafas o simplemente hacen de influencer carcelario, lo que da muestra que las cárceles chilenas no son lo mismo de antes.
Mediante datos otorgados por Gendarmería, se pudo constatar cómo los celulares son los reyes al interior de los recintos. El año 2023 se incautaron 30.783 móviles, mientras que de lo que llevamos de 2024, ya van 6.859.
¿Quiénes ingresan estos aparatos? Los datos son reveladores 12 aparatos fueron ingresados por funcionarios, 30 por ciudadanos y 3 por abogados, mientras que 4.106 por los famosos "peloteros".
Envío que se realiza tras comunicación entre internos y el exterior vía telefónica, al igual que cientos de estafas, algo que se quiere evitar con los inhibidores.
Hace unos días el ministro de Justicia, Luis Cordero, anunció que los inhibidores de señales ya están operativos en 20%, tecnología israleí que tuvo un costo de $10 mil millones.