La historia de amor de la actriz Paulina Urrutia por su pareja, el periodista Augusto Góngora, quien desde hace más de 7 años padece alzhéimer han puesto en relieve no solo esta enfermedad, sino también la abnegación en los cuidados que no solo ella, sino muchas familias realizan a lo largo del país. 

Esta mañana, la también exministra estuvo en entrevista con Mucho Gusto y señaló que "eso es lo que empieza a ocurrir con estas enfermedades que son tan largas y que demandan este cuidado donde uno empieza a perder la vida. Pero es bastante paradojal, porque quienes cuidan en nuestro país superan en un 86% a quienes profesionalmente cuidan a sus familiares. Estoy hablando de papás, mamás, hermanos, hermanas". 

"Estas enfermedades vivnieron para eso, para que tomáramos consciencia de que hay una etapa en la vida que nosotros nos olvidamos; el ocaso, cuando nosotros nos acercamos a la muerte, cuando vamos dejando la vida y es una etapa que en nuestros tiempos, como se ha extendido la vida es un periodo muy largo", dijo.

Sin embargo, Paulina expresó al panel que "es duro, pero como toda dedicación, es posible si uno ama, si uno es capaz de estar con el otro, contener al otro y en ese proceso, contenerse uno en esto que ha encontrado como tarea. Por eso lo digo, no es solo un desafío familiar, personal; es un desafío de nuestra sociedad y de comprender que esta fase la tenemos que vivir no solo individualmente, sino colectivamente para que sea más llevadero". 

Estar a cargo de una persona que requiere de cuidados también ha afectado a la actriz. "Me debo muchas vacaciones. Este febrero que lo trabajé completo, sí me gustaría un poquito de tiempo para mí, que eso es lo más difícil, encontrar el equilibrio. (...) Así nos perdemos todos en la vida, en el cotidiano. Tenemos y debemos hacer tantas cosas que perdemos lo que queremos hacer, lo que deseamos hacer", indicó. 

"Ahora, en el caso mío yo he visto esta tarea de manejo de emociones, que en el fondo es una tarea de vida, un propósito de vida. Yo hasta el día de hoy amo al Augusto, lo amo cada vez que lo veo y claro, hoy día estoy más comprometida con el dolor porque está viviendo procesos dolorosos y por supuesto, creo que nadie merece dolor. Pero no siento frustración, es una etapa de la vida", se sinceró. 

Pero aunque se trate de una enfermedad para la cual no hay cura, Urrutia no dejó de destacar que "es bien increíble, porque si bien se pierden todas las capacidades de comprensión, de entendimiento, hay una lucidez afectiva". 

"Yo no tengo una lucha con la enfermedad. Es un proceso de ir aceptando estos cambios que son de deterioro, desgaste y avance. (...) Lo importante como pareja es estar con él y en ese estar con él, él también está conmigo", concluyó.

Revisa la entrevista completa en el video.