Como es tradición la familia Real Británica se trasladó hasta Sandringham, Norflok, para celebrar la Navidad.
Sin embargo, estuvo marcada por grandes ausencias. Es que pese a los rumores de un posible reencuentro con los Windsor, el príncipe Harry, Meghan Markle y sus hijos estuvieron lejos de pasar la festividad en Inglaterra.
Navidad sin Harry y Meghan Markle
Según lo revisado en Mucho Gusto, los duques de Sussex esperaron la invitación del rey Carlos III, la cual no llegó, por lo que decidieron pasar unos días de vacaciones familiares en Costa Rica.
Distante al calor del país centroamericano, la familia Real Británica celebró la primera Navidad como anfitrión de Carlos III, desde su coronación el 6 de mayo.
La celebración dejó innumerables postales de los integrantes de la realeza, como la de los hijos de los príncipes de Gales: George, Charlotte y Louis.
Además, por primera vez en 30 años, Sarah Ferguson fue invitada a la celebración de la Corona Británica, lo que demuestra una vez más su buena relación con el príncipe Andrés, de quien se divorció en 1996.