Tramadol, quetiapina e incluso rize, medicamentos llamados psicotrópicos son el catálogo que comercializa las mal llamadas farmacias callejeras.
A pesar de los constantes operativos contra el comercio ambulante, hay veredas capitalinas que siguen atestadas por la venta ilegal de alimentos de dudosa procedencia, ropa falsificada y fármacos.
Farmacias callejeras
El equipo de Mega Investiga recorrió tres puntos específicos de Santiago para dar cuenta de cómo se comercializan medicamentos que necesitan receta médica como si fueran dulces.
En Alameda, entre Av. Las Rejas y calle Hera, los gritos dejan clara la presencia de farmacias callejeras. Rize y quetiapina al alcance de cualquiera sin ir al médico y sin receta.
Situación que se repitió en calle San Isidro y en las afueras del Terminal de Santiago, donde los comerciantes venden literalmente todo tipo de remedios.
"Estas son bandas organizadas que encontraron este nicho de negocio y donde están lucrando con el dolor ajeno", acusó Jorge Cienfeugos, presidente del Colegio Farmacéutico.
Según cifras del Observatorio de Salud Mental de Chile, los medicamentos que más se compran en ferias libres son los benzodiacepinas con un 60%, seguido por los remedios de uso habitual con receta con un 35%.
Fármacos que necesitan receta que se venden como pan caliente en la calle, dejan en alerta a las autoridades sobre las advertencias que deben tomar las ciudadanía para no arriesgar la salud.