Si bien históricamente el comercio ambulante ha estado presente en el centro de Santiago, de un tiempo a la fecha éste ha tenido un explosivo aumento.
Esta situación ha generado un sinfín de problemáticas a los vecinos y locatarios ante la proliferación de la delincuencia en torno a dicha actividad, y la competencia desleal.
"Salón de belleza" en pleno Paseo Puente
En un recorrido del equipo de Mega Investiga por las calles del casco histórico, comprobó el desorden que produce esto y cómo se han instalado "salones de bellezas" en plena vereda de Paseo Puente.
La oferta es variada: pestañas, tatuado de cejas y peluquería son parte de un catálogo que va desde los $5 mil hasta los $45 mil.
Este negocio ilegal es atendido por mujeres, quienes relataron cómo es trabajar en el lugar ante las fiscalizaciones.
"Nos llevaron detenidas, porque no teníamos documentos. Dicen que esto está prohibido, que no está en la ley trabajar así en la calle", dijo una de ellas.
Sin embargo, a diferencia de otros comerciantes ambulantes, dicen no tener miedo a las fiscalizaciones de Carabineros y seguridad municipal. "Hay gente que se asusta, porque a los demás no les pueden decir nada y qué nos pueden decir a nosotros".
"Las clientas se paran y nosotras caminamos y después volvemos", sostuvieron entre risas las mujeres.
Este es uno de los tantos puestos de comerciantes ambulantes que se instalan en el casco histórico de Santiago, quienes incluso se coordinan a través de WhatsApp para burlar los controles.
En relación a esto, la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, comentó que "desde la instalación del Destacamento Santiago Seguro, se han desarrollado más de 12.500 operativos de recuperación de espacios".
Por su parte, la Subsecretaría de Desarrollo Regional destinará este año $1.200 millones para mejorar la seguridad en el casco histórico.