El gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, abordó la decisión tomada por Metro de Santiago de cerrar un acceso de la estación Puente Cal y Canto, debido al aumento de la delincuencia en la zona.
En concreto, el acceso que será cerrado está ubicado en Avenida La Paz, mismo lugar donde se instalan cocinerías ilegales, ambulantes y se registran incivilidades y delitos.
"Me enteré por la prensa"
Orrego aseguró haberse enterado del polémico cierre por los medios de comunicación, además de desconocer las autoridades con las que Metro de Santiago discutió la medida.
"Yo, literalmente, me enteré por los medios de comunicación, a mí no me informaron de esa decisión. Me enteré por la prensa, como se dice habitualmente", afirmó.
En este sentido, dijo "entender que Metro no es responsable de lo que pasa en la superficie", pero que "desde el punto de vista de la ciudad, no puede ser una solución que producto de la delincuencia, el vandalismo y el comercio ambulante y las visibilidades terminemos cerrando estaciones de Metro. Así que yo espero que sea temporal".
"No nos podemos acostumbrar a la cochinada"
"No nos podemos acostumbrar a la cochinada que hay hoy día en ese sector. Hay que restablecer el imperio del derecho, y es lo que estamos haciendo en este trabajo conjunto con los tres alcaldes", añadió Orrego.
La autoridad regional indicó que en el sector "se requiere mayor fiscalización, persecución criminal a las bandas criminales, obras urbanas y mayor presencia policial. Pero eso no se resuelve con el cierre de una estación, lo que se hace con eso es simplemente minimizar los problemas del Metro".
“Yo espero que una vez que se resuelvan los problemas arriba, se reabran la estación de Metro y volvamos a recuperar la ciudad”, cerró.