En una sincera entrevista en el programa Only Fama, Gissella Gallardo compartió detalles sobre su reconciliación con Mauricio Pinilla, un proceso que calificó como largo y complejo.
El primer paso hacia la sanación de su relación fue la decisión de ambos de ingresar a terapia. Para Gissella, el propósito de este proceso no fue la reconciliación en sí, sino mejorar la salud emocional de Pinilla, algo esencial para el bienestar familiar. "Mis hijos querían un papá sano, contento, feliz, encantado con la vida", añadió.
A lo largo de la conversación, Gissella reflexionó sobre los momentos difíciles que vivieron, resaltando la lucha interna que Mauricio enfrentó y que fue crucial para su cambio. "Él me contaba que en momentos él se miraba al espejo y no le gustaba el Mauricio que veía", confesó.
Gallardo también destacó la importancia de estar dispuesto a recibir ayuda. "Si uno no ve a alguien comprometido con las ganas de reformar esta familia, con las ganas de salir adelante y todo, por él, por los niños, por mí, por nosotros, no lo hubiese aceptado", afirmó.
En cuanto a las críticas que siempre han rodeado su relación, Gissella se mostró tranquila. "Tengo millones de críticas, mensajes mala onda. Sabía la repercusión de personas que quizás se podían referir al tema. Yo estoy tranquila con mi decisión", expresó.