En el capítulo 364 de Juego de Ilusiones, Camila (Mónica Echeverría) y Sofía (Magdalena Müller) esperan noticias sobre Javiera (Fernanda Finsterbusch) tras ser atacada y Lidia (María Ester Messina) les cuenta que sigue en el cuartel policíal.
Justo en ese momento, Benjamín se despierta y el monitor empieza a sonar. Cuando la joven va subiendo las escaleras, tocan la puerta y todos se asustan, pues los acontecimientos han provocado un temor generalizado.
La hija mayor de Julián (Julio Milostich) abre la puerta y les pide a su hermana y a la asesora del hogar que no se asusten pues el hombre es Guzmán (Camilo Carmona) y ella no lo conoce.
Guzmán se pone nervioso
Luego de ingresar, Guzmán le cuenta a Sofía que el motivo de su visita es porque Mariana (Carolina Arregui) le envió un regalo. Al abrirlo, se da cuenta que son unos zapatitos tejidos a mano.
El gendarme se da cuenta que algo ocurre y Camila le cuenta que Javiera fue víctima de un intento de secuestro.
Guzmán siente una conexión especial con la madre de Benjamín y le ofrece su ayuda, lo cual provoca que intercambien números, pero de una manera muy nerviosa.