En el capítulo 390 de Juego de Ilusiones, Rubén (Etienne Bobenrieth) recibe a Ignacio (Felipe Contreras) en su oficina, por una importante razón relacionada con Benjamín.
El abogado le confiesa al detective que está apurando los trámites para reconocer la paternidad de su hijo: "Necesito saber que cuento con tu apoyo".
El prefecto cree que el hijo de Victoria (Alejandra Fosalba) sabe que Sofía (Magdalena Müller) quiere sacar al niño del país, pero termina entregándole la noticia.
Rubén está asustado
Rubén le pregunta a Ignacio si le concedió el permiso a Sofía para viajar fuera de Chile y él le revela que no: "Qué mier... tiene Sofía en la cabeza, tan terrible es que yo sea el papá de su hijo", expresa el abogado.
El detective no está de acuerdo con la actitud de quien siempre ha sido su enemigo, sin embargo, igualmente se pone de su lado: "Sofía nos engañó sin asco en algo tan importante, no puede juzgar nada".
La desesperación del esposo de Camila (Mónica Echeverría) es tal que termina rogándole al prefecto que no firme el documento y él lo sorprende con una inesperada respuesta: "Yo voy a hacer lo que considera mejor para Benjamín, que finalmente es la gran víctima de todo esto".