En el capítulo 391 de Juego de Ilusiones, Julián (Julio Milostich) llega al comedor de la casa, pues tiene algo muy importante que decirle a sus hijas.
El empresario, muy enfadado, les explica a Camila (Mónica Echeverría) y a Javiera (Fernanda Finsterbusch) que Valentina (Camila Hirane) aún sigue convaleciente, por lo que no quiere que la molesten: "No quiero que nada ni nadie en esta casa la altere".
"Ella no tiene idea de lo que pasó con Lucas y mucho menos del lío que hay con mi nieto", agrega el empresario.
Camila y Javiera están molestas con su padre
Javiera le explica a su papá que tienen muy claro, pues él lo ha repetido muchas veces, que Valentina debe recibir la información de a poco, pero él es mucho más enfático: "Esa información se la voy a dar yo, cuando crea que es el momento indicado".
Camila no aguanta la situación y decide retirarse de la mesa, pues no tiene planeado cruzar palabra con la inversionista.
La estudiante de veterinaria y Rubén (Etienne Bobenrieth) siguen a la estilista, pues tampoco están de acuerdo con las medidas tan autoritarias que está poniendo.