En Juego de Ilusiones, Victoria (Alejandra Fosalba) muere de amor por Julián (Julio Milostich) y por eso ha aguantado llevar una vida paralela por décadas con tal de seguir a su lado. Pero ahora que Mariana (Carolina Arregui) no está, es el momento perfecto para convertirse en su pareja oficial, ¿o no?
Los dos se conocieron un par de años antes de que Mardones hiciera un trato con Nadir Nazir (Hugo Medina) para casarse con su hija. Sin embargo, Victoria siempre pensó que ella era la verdadera mujer del empresario.
Ella siempre estuvo enterada de este trato e incluso cooperó al hacerse pasar por amiga de Mariana sin remordimientos, pero por todo esto tuvo que pagar.
Una vez la madre de Javiera (Fernanda Finsterbusch) se enteró de su traición, armó una escena del crimen para inculparla por la desaparición y presunta muerte de su esposo, motivo por el cual terminó unos días en la cárcel.
Nunca creyó que Julián estaba muerto
Ya en libertad, Victoria siempre estuvo convencida que Julián estaba vivo y luchó por descubrir su paradero. Incluso llegó a hacer un trato con Ignacio (Felipe Contreras) para ayudarlo en su investigación.
Sin saber que su amante ya estaba libre del búnker, recibió un llamado anónimo de su parte. Mardones no emitió ninguna palabra, pero ella se convenció que era una muestra de que Mardones estaba bien.
Su esperado reencuentro
La mayor sorpresa de su vida la tuvo en el matrimonio de su hijo Rubén (Etienne Bobenrieth) con Camila (Mónica Echeverría), pero no fue por la ceremonia, sino porque fue el momento que eligió Julián para hacer su regreso triunfal.
Una vez terminó la boda, ambos se fueron a la misma cabaña en la que por años tuvieron apasionados encuentros y bailaron muy cómplices el vals en la fiesta de sus hijos.
Finalmente, tras el encarcelamiento de Mariana, Victoria aprovechó su oportunidad para mudarse a la casa de las Mardones, con la venia de Camila y Sofía. Pero la noticia no fue del completo gusto del discípulo de Nadir, quien se sintió acorralado por sus hijas para aceptarla.