Valentina (Camila Hirane) hizo de las suyas para que Sofía (Magdalena Müller) volviera a sospechar de una infidelidad entre el detective Abascal (Felipe Contreras) y ella.
En el capítulo 328 de Juego de Ilusiones, la inversionista encontró a Ignacio completamente borracho y lo llevó hasta su departamento. La tensión entre los dos creció, pero ella prefirió dejarlo en su cama, donde se quedó inmediatamente dormido.
Sin embargo, utilizó esto para sacar chispas en la hija de Julián (Julio Milostich). Justo cuando la administradora del stripcenter lo llamaba preocupada, apareció Valentina de regreso en la casa Mardones para contarle: "Lo acabo de dejar en su departamento acostado, estaba borracho", enterada de los celos que ella le causa a Sofía.
Debido a su provocación, en el avance del próximo episodio, la hija mayor de Julián se echará a llorar y García disfrutará escucharla sufrir tras la puerta.
Los fanáticos de la teleserie de la tarde tuvieron posturas divididas ante el conflicto de los personajes de Magdalena Müller y Camila Hirane. Algunos apoyan la "venganza" de Valentina debido a la altanera actitud que ha sostenido Sofía, mientras que otros argumentan que este ataque fue inmerecido.