En el último tiempo en Juego de Ilusiones, la vida de Ignacio Abascal, interpretado por Felipe Contreras, cambió del cielo a la tierra.
Recordemos que el detective llegó a la historia protagonizada por Carolina Arregui, para investigar la desaparición de Julián (Julio Milostich). Con la ayuda de Sofía (Magdalena Müller), pudo dar con el paradero del empresario y liberarlo de su secuestro. Actualmente, el presente del prefecto es distante a su inicio.
La labor del detective
Ignacio fue el encargado de buscar pistas sobre el paradero de Julián. En medio de esta investigación, descubrió que existía una red de corrupción liderada por Nadir (Hugo Medina), a la cual pertenecían poderosos empresarios, incluyendo al padre de Sofía. Debido a lo anterior, el detective fue ascendido por su gran labor y se convirtió en prefecto de Investigaciones.
La relación con Sofía
En medio de las diligencias, las cosas comenzaron a confundirse entre Ignacio y Sofía. Justo en ese momento, la hija mayor de Mariana (Carolina Arregui) estaba pasando por una gran crisis con Rubén (Etienne Bobenrieth), pues él le había sido infiel con Camila (Mónica Echeverría) y con Susana (Nathalia Aragonese). Luego de un encuentro íntimo, la joven quedó embarazada y le contó al detective que iban a ser padres.
Los conflictos con Julián
Pese a ser su salvador, Julián e Ignacio nunca se llevaron bien. El empresario se encargó de decirle a Sofía que él nunca iba a estar a su altura, pues él tenía grandes cosas planeadas para su futuro. Los enfrentamientos continuaron y hace un par de episodios tuvieron un encuentro lleno de tensión.
El presente de Ignacio
Luego de todo lo anterior, la personalidad de Ignacio cambió radicalmente. Cuando Sofía le dijo que se iba a ir del departamento, él tomó una pésima decisión y superó sus límites bebiendo alcohol. Esta situación le valió problemas con varias personas.