No es un misterio que para el detective Ignacio Abascal (Felipe Contreras) no ha sido fácil encontrar a los culpables de todos los crímenes que han ocurrido al rededor de la familia Mardones, sin embargo, el actor que interpreta al policía, explicó que todo se debe a estrategia.
Para el intérprete, el objetivo de su personaje siempre ha sido desarticular la mafia de los Rumían que es el gran conflicto de Juego de Ilusiones.
"Lo único que quiere es poder atrapar a los Rumián"
Dentro de los conflictos que debe enfrentar su personaje, está por supuesto, encontrar a la cabecilla de la mafia de los Rumián, pero también tiene temas personales como su relación con Sofía que a veces hace que actúe desde el corazón y no la razón.
"Siempre el objetivo principal de Ignacio como detective es el desenmarañar todo esto, es el encontrar a los Rumián, este gran caso que está ocurriendo en el país, ¿no? Que hay unos asesinos en serie que están matando gente. Ignacio en su lado profesional, en su línea profesional, lo único que quiere es poder atrapar a a los Rumián", comentó el actor.
Además, abordó qué ha provocado en él todo lo que ha sucedido con Sofía (Magdalena Müller) y también por qué sigue viviendo en la mansión de los Mardones cuando su historia con la hija mayor ya acabó.
"Hay una razón profesional de que yo creo que Ignacio siente que ahí están ocurriendo las cosas, que ahí puede encontrar algo", agregó en relación a su estadía en la casa de los Mardones.
"Ignacio es humano y ocurrieron cosas con Sofía. Yo siento que Ignacio sintió despecho, en un momento se involucró con con Valentina. Y siempre el corazón de Ignacio, de alguna u otra manera, siempre ha estado con Sofía. Pero cuando hay amor, hay amor, y muy difícil sacárselo del corazón, que siento que es más entretenido que el personaje quede con ese amor adentro", concluyó.