Esta semana en Seyrán y Ferit, el joven Korhan ha tenido que enfrentar una serie de conflictos que han complicado no solo su matrimonio, sino que también su entorno familiar.
Peleas, besos inesperados y desesperadas peticiones han sido solamente algunos de los problemas que ha enfrentado Ferit (Mert Ramazan Demir) en los últimos capítulos.
La violenta pelea de Ferit
Luego de querer disfrutar un día de descanso con Seyrán (Afra Saracoglu), Ferit es enfrentado por un misterioso hombre en su gimnasio, quien lo acusa de haber coqueteado con su novia.
A pesar que el joven niega las acusaciones, es acorralado por un grupo que comienza a golpearlo. Afortunadamente, Fuat (Dogukan Polat) llega a su rescate y salen solo con algunos rasguños.
El sorpresivo beso de Suna
Ferit, Seyrán, Suna (Beryl Pozam) y Fuat salen juntos a una noche de diversión, sin embargo, la mayor de las Sanli bebe unas copas de más, lo que lleva a más de un problema.
En concreto, Suna le pide a su cuñado que la saque a bailar, donde comparten un íntimo momento y la joven lo besa cuando su hermana está solamente a unos metros del lugar.
La súplica de Seyrán
Tras la decisión que tomó Kazim (Diren Polatogullari) de comprometer a Suna con el hombre viudo que había pedido su mano, Seyrán recurre a su esposo por ayuda.
A cambio la joven le ofrece hacer lo que él quiera, lo que lleva a un tenso momento entre ambos.