Seyrán (Afra Saracoglu) descubrió que Sultan (Irem Altug), la empleada de los Korhan, ponía píldoras anticonceptivas en su té. Esto generó un verdadero escándalo en la mansión y trajo consigo aun más secretos del pasado que podrían terminar para siempre la relación de la chica de Antep con su esposo.
En el capítulo 120 de Seyrán y Ferit, Ferit (Mert Ramazan Demir) sospechó que su tía Ifakat (Gülçin Santircioglu) fue quien dio la orden a la sirvienta y decidió confrontarla para que deje de intervenir en su vida.
Un as bajo la manga
Las evidencias estaban en su contra. Ifakat es quien da las órdenes directas a Sultan y decidió despedirla de la mansión entre cuatro paredes, evitando que la mujer hable más de la cuenta. Así, Ferit pensó que podría hacer caer a su tía de una buena vez, pero encontró la forma de dar vuelta la situación en su favor.
"Deberías olvidarlo para que Sultan no hable. Deberías convencer a Seyrán de que lo deje ir. No quisiera imaginar... si esa mujer hablara se podría saber su secreto. ¿Qué harás si en medio de la acusación, Sultan les dice a todos que dormiste con ella?", señaló la viuda dejando atónito a su sobrino.
"Acéptalo, esa fue tu primera vez. Sultan te ayudó a volverte un hombre. ¿Crees que algo así pasaría en la mansión sin que yo tuviera conocimiento?", agregó.
Seyrán siente aversión por Sultan y una relación entre ella y su esposo sería devastador para el joven matrimonio. Pero hubo algo más que terminó de espantar a Ferit: Ifakat planeó este encuentro sexual con la empleada.
"Tú eres un Korhan y era natural que pronto estarías con una mujer y eso no podía estar fuera de mi control. Entiende que lo hice porque estaba preocupada por ti, sobrino. De esa manera sabría que no saldrías lastimado. Todo lo que hice fue para asegurarte una buena vida al final y ahora nadie lo sabrá porque Sultan acaba de salir de nuestras vidas", chantajeó Ifakat para protegerse.