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"Ella fue una luz": Las emotivas palabras de hijo de Mary Rose Mac-Gill tras su fallecimiento

  • Por Sebastián Paillafil

Este lunes se conoció la muerte de Mary Rose Mac-Gill, reconocida gestora cultural y considerada como la última socialité chilena, a los 90 años de edad.

Su deceso se produjo a las 2:40 horas en el Hospital de la Fuerza Aérea de Chile (FACh), donde se mantenía internada tras someterse a una compleja operación.

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Las emotivas palabras de hijo de Mary Rose Mac-Gill

Julio Subercaseaux, hijo de Mac-Gill, se refirió en Mucho Gusto sobre el legado de su madre en las culturas y artes, afirmando que "fue una luz".

 

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"Ella ingresó hace más de una semana por un tema broncopulmonar. Tuve que traerla en una condición bastante crítica hace diez días atrás, se le hizo una reanimación y todo parecía que iba bien, pero después fue decayendo y se le encontró una cosa en el corazón que estaba relacionada y terminamos en esto", partió diciendo, respecto al estado de salud de su madre, previo a su deceso.

"Ella fue una luz"

En cuanto a su figura prominente en el espectáculo y la cultura nacional, Subercaseaux señaló que "como se dice, lo comido y lo bailado no se lo quita nadie".

"Es un legado bastante grande que es difícil resumirlo en una palabra, tú mencionaste las culturas y las artes como el título, pero la bajada es larga. Pero, por ejemplo, mi mamá hace unos años atrás comenzó a entregar becas y es increíble que me ha llamado gente de Antofagasta, de Temuco, gente muy humilde que iniciaron su vida artística, pero que hoy son grandes artistas en el canto, canto lirico, en la actuación", agregó.

"Ella fue una luz, fue una luz que ayudó a mucha gente a encontrar un rumbo en su vida en el tema de las artes", resaltó Subercaseaux.

Asimismo, destacó que "mi mamá no le decía que no a nadie, se acercaba a cualquier persona y mi mamá se quedaba pegada conversando ahí, de lo que fuera. Ella despertaba mucho cariño y por eso era muy transversal, ella se conectaba con gente de muy alto nivel como reyes, primeros ministros en Europa, pero también con toda otra gente. Hemos recibido llamadas y cariño de los lugares más increíbles".

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