Una lealtad femenina irrompible: Así es la amistad de Laura, Antonia y Mané en 100 Días Para Enamorarse

Queda cada vez menos para el gran estreno de 100 Días Para Enamorarse. Será el próximo lunes 9 de diciembre después de Juegos de Poder cuando finalmente podrás conocer la gran historia de la nueva teleserie nocturna de Mega, una comedia que estará llena de conflictos y romance.

Pero además de mostrar los problemas en las relaciones de pareja, también revelará la historia de una gran amistad, de la cual te adelantamos un poco a continuación:

Laura (Mane Swett) y Antonia (Luz Valdivieso) son dos amigas de 40 años. Su amistad se remonta a la época de colegio. Han vivido todos sus temas adolescentes, juveniles y maduros, juntas. Han compartido pololeos, matrimonios, embarazos imprevistos sin pareja, nacimientos de hijos, pérdidas amorosas, peleas entre ellas, reconciliaciones, pero sobre todo una lealtad femenina irrompible y el total conocimiento de la una por la otra. Han recorrido muchos caminos en el mismo escarabajo de Antonia hace veinte años.

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Ambas están tan conectadas que incluso ambas decidirán tomar una drástica decisión con sus respectivas relaciones...

Para Laura, quién todavía está enamorada de Pedro (Diego Muñoz), la separación se le hará un verdadero martirio, ya que firmará un contrato para divorciarse legalmente por cien días...

Para Antonia, su vida se le desarma al reencontrarse con Diego (Marcelo Alonso), un ginecólogo que ha sido el amor de su vida desde que era una adolescente.

Luego está Mané (Celine Reymond), quien está casada con Javier (Fernando Larraín). Es abogada del estudio de Laura y Pedro. Tiene una relación menos estrecha con Laura y Antonia, motivo por el cual siempre está celándolas. Mané es desatinada, copuchenta y vanidosa. Su pareja es padre de su hija Julieta y viaja constantemente entre Santiago y Linares. Él no se ha querido casar, y ella se lo pide constantemente.