Estas son todas las infidelidades de Julián Mardones en Juego de Ilusiones
Uno de los personajes más odiados de Juego de Ilusiones es Julián Mardones (Julio Milostich), quien se ha involucrado en constantes conflictos debido a su fuerte personalidad.
En el ámbito amoroso, el empresario también ha sido cuestionado, pues a lo largo de la ficción ha sido infiel en varias ocasiones y acá te las contamos todas.
Julián le fue infiel a Mariana
En el inicio de la teleserie, Julián llevaba un matrimonio de 25 años con Mariana (Carolina Arregui) e incluso, realizaron una fiesta por su aniversario.
Justo antes del festejo, la madre de Javiera (Fernanda Finsterbusch) descubrió que su marido le había sido infiel durante toda su relación con nada más ni nada menos que su mejor amiga, Victoria (Alejandra Fosalba).
En la fiesta, la ahora reclusa lo durmió y lo encerró en el bunker de la casa por varios meses, a modo de venganza.
Julián conoció a Valentina
Cuando Mariana ya estaba en la cárcel, Julián comenzó una relación más formal con Victoria y la invitó a vivir a la casa.
Todo iba bien, hasta que el empresario recibió una nueva clienta en su holding, Valentina (Camila Hirane) lo visitó para pedirle ayuda a invertir.
El padre de Sofía (Magdalena Müller) quedó completamente flechado con la joven y luego de varias citas, camufladas con reuniones de trabajo, se besaron.
La madre de Rubén (Etienne Bobenrieth) comenzó a sospechar que Julián le era infiel con la mujer y perdió la cabeza, llegando incluso a estar a punto de matarla.
Patricia llegó a la historia
Patricia (Ximena Rivas) aterrizó en la vida de los Mardones para vengarse de Mariana por haber matado a Alana (Dayana Amigo) y se fijó en Julián, solo porque era la pareja de Valentina, su hija.
Pese que prometió terminar con su vida, lo invitó en varias ocasiones a su departamento, situación que se prestó para que pasara algo más entre ellos.
La inversionista intuyó que algo pasaba entre ellos y puso una cámara en la pieza de su madre, la cual le mostró un encuentro íntimo que no le gustó para nada.