NICOLÁS PÉREZ DE CASTRO
Es un empresario, economista y exitoso. Pragmático, ansioso, trabajólico, bastante narcisista y un adicto a la tecnología. Es poco conectado con su mujer y con sus hijos Camila y Borja. Producto del abandono de su esposa, sufre un vértigo fulminante que lo obliga a cambiar su vida. Así, sus hijos toman la decisión de llevarlo una temporada al fundo familiar en Yerbas Buenas. Será en esta nueva vida, que experimentará una segunda oportunidad para vivir de otra forma y encontrar el amor.
Frases típicas: “Este país está lleno de flojos”. “Parece que ser perfecto es un defecto”. “A mi familia le doy de todo y reclaman”. “Si no hago yo las cosas, no las hace nadie”. “¡Necesito un clon mío!”. “En este mundo no hay nada cierto, excepto la muerte y los impuestos”.